Algo de mi obra:

No me hallarás

En el final de los tiempos
me buscarás y no me hallarás,
ni los besos, ni los suspiros
estarán ahí para salvarte.

La cabaña sostendrá sus grietas
con la pura melancolía
y los lirios escarbarán su propia tumba
para encontrar la cimiente de su raíz.

Se estrecharán las hendiduras de la esperanza,
las sombras se anclarán en mis lunares
y mis ojos dormirán eternamente.

En el final de los tiempos
me buscarás y no me hallarás,
seré mar, luz o tinieblas,
-ocaso, quizá seré ocaso -,
y no me hallarás.

Espera infinita

Dime si esperarte es posible, aún en lo imposible,
aún sabiendo que las piezas distorsionan las esperanzas,
esperanzas que se cuelan en los dedos del mar
y se sofocan en el fuego del llanto
que no apaga las brasas de la espera.

Dime si vendrás en el silencio, o en el bullicio,
en la calma, en la premura,
dime si en la brisa, o en los resonantes rayos
que hacen arder la arena de los desiertos.

Dime si seremos infinito,
o fugaz estrella que se le escapa al cielo.
Dime, que muero y no renazco a esta vida,
que es un puño de nada y a la nada se vuelve,
en el turbio desprecio de tus latidos.

La aldaba entre la arena, Colectivo Entrópico, 2017